jueves, 16 de diciembre de 2010

Cielo





Dicen que allá en el cielo, todo es felicidad, me pregunto si en verdad será, me pregunto, además, cómo es y quiénes van. Algunas veces cuando miro al cielo, me siento volar, me descubro en la inmensidad del universo y las estrellas a mi alrededor, soy una partícula, una mezcla de polvo y diamante, un espíritu volátil y soñador, me descubro ahí.... en medio de un mar inagotable de divinas ráfagas de luz. Y viajar en el tiempo, y no tener edad. Volar y flotar en un camino de dulces fuegos naturales, entremezclarme en la nada y el todo. Quedarme para siempre más allá de las nubes de seda, brincar el trampolín del mar y llegar ahí donde se encuentra el último rincón. Cuando yo muera, viajera del universo quiero ser, que se lea en mi tumba terrenal:

"Su cuerpo yace aquí, y su alma vuela libre"

No he tenido inconveniente en ir de aquí a allá, no he sabido quedarme quieta, pues mi espíritu se inquieta, corazón nómada, piel curtida en diversos terrenos. Sé transportarme por las ondas de la música, sé atravesar fronteras con ricos alimentos. Y... ¿qué se come en el cielo? ¿Una flor fugaz o un meteoro de pan? Que se expandan mis ojos, que mi voz no se quiebre, que mi aventurero corazón se alegre. ¿qué hay más allá?

2 comentarios:

MAMUMA dijo...

Siento no poder contestar a tus preguntas,pero de momento nadie que yo conozca lo sabe.

Anita dijo...

Ese fue un gran intento MAMUMA
pues debe ser tan bueno que casi no regresan, y los que regresan se vuelven a ir.